En concreto, el trabajo ha identificado los canales de sodio Nav1.7 en las células nerviosas de base como reguladoras de varias formas de dolor crónico. Los investigadores quería descifrar porqué un fármaco, la carbamazepina, era eficaz en el alivio del dolor en los miembros de una familia que sufre de erythromelagia, Así, realizaron un análisis genético exhaustivo y descubrieron que una variante específica -una diferencia de un solo aminoácido entre 1.800- en el canal de sodio explicaba porqué esta familia respondía al fármaco.
En este nuevo estudio, el equipo de Yale ha identificado una mutación adicional, la segundo que era sensible al tratamiento con carbamazepina. En teoría, los pacientes con dolor crónico con dicha mutación deberían responder al tratamiento con carbamazepina. «El trabajo nos muestra queperseguir un tratamiento personalizado con fármacos no es una utopía».
No hay comentarios:
Publicar un comentario